Ilustración: Cristina Arboleda
Pongámonos en la piel de quienes llegan a Ecuador. Muchos lo hacen forzados por el miedo, el hambre y la desesperación. Y siempre es difícil dejar atrás el hogar, la patria y los afectos.
Pongámonos en la piel de quienes no tienen más opción que abrirse camino a pesar de la incertidumbre y recorren miles de kilómetros sorteando toda clase de peligro.
Pongámonos en su piel, porque nosotros ya fuimos ellxs o lo seremos. Todxs tenemos raíces migrantes, hemos migrado o tal vez migraremos en algún momento. Todxs tenemos familiares y seres queridos que se fueron. Si no lo han hecho, es muy posible que ocurra en cualquier momento.
Desde Sentimos Diverso, organización colombo-ecuatoriana integrada por personas diversas y migrantes que trabajamos por un mundo en el que todxs tengamos los mismos derechos y oportunidades, felicitamos la decisión de la jueza Judith Naranjo de aceptar las medidas cautelares a favor de las personas venezolanas que ingresan al Ecuador sin pasaporte. También rechazamos las nuevas medidas adoptadas por el gobierno que ahora permite el ingreso de ciudadanos venezolanxs con cédula pero exige un certificado de validez apostillado de la misma, violando el derecho a migrar, señalado en el artículo 40 de la Constitución.
Ecuador ha sido históricamente refugio para quienes huyeron de las guerras mundiales, las dictaduras del Cono Sur, desastres naturales y conflictos armados en Latinoamérica. También más de un millón de ecuatorianxs han buscado mejorar su vida en diferentes lugares del mundo.
Rechazamos toda manifestación de discriminación y xenofobia: los insultos, los estereotipos y esas ideas de que lxs migrantes vienen a quitarnos algo, a traernos problemas. Ecuador es un país diverso y quienes lo habitamos debemos solidarizarnos con las personas que lo están atravesando para llegar a otros destinos y con las que llegan hasta aquí con la imperiosa necesidad de continuar sus vidas.
